28.6.09

Rutas

Si no asoma vamos a Onis
Si sí asoma vamos a Isis

25.6.09

San Sonite


17.6.09

Dúplex

ARRIBA LA BIRRA




ABAJO LAS ALOJABA

12.6.09

Soneto'o




10.6.09

Soneto

nos marchamos el jueves y volvemos el lunes,
el mundo gira y gira, nunca cesa en su giro,
ya se nos acabaron las ferias del retiro,
ya volvemos al íes y a los días comunes,

al runrún rutinario de todos los runrunes,
deshago la maleta, echo un vistazo, miro,
todorov, tsvietáieva, nabokov (vladimiro)
y la última novela de antónio lobo antunes

acumulo lecturas para todo el verano,
luego se alternarán las dudas y los días,
las playas de la antilla y el calor extremeño,

pasearé junto al agua con blanca mano a mano,
pero no hablaré más de princesas sombrías
y en negra paradoja naufragará mi empeño

8.6.09

Prêt-à-porte

A veces, no a menudo, pero a veces, en Madrid, Preciados, Sol, Arenal, Gran Vía, etcétera, entro en tiendas de moda por lealtad familiar: escudero más fiel que cortefiel. Como no sé apreciar la calidad ni la belleza ni el diseño de tanta y tan vaporosa prenda prêt-à-porter, me quedo a la puerta, quieto, esperando, deseando partir, procurando no entorpecer el minucioso movimiento de la clientela ni obstruir los detectores de la entrada. Procuro perder la mirada (visu conspectu), no ser visto por no ver, pero no por ello dejo de captar de reojo perpeljidades, hipermetropías, incluso risitas de conejo. La razón es cómica y sencilla, pues soy yo mismo la manifestación de la impostura: ocupo, sin serlo ni menos aún parecerlo, el lugar del segurata.

1.6.09

Ser o no ser

«El 1 de junio de 1599, el arzobispo de Canterbury prohibió los epigramas, pasquines y las sátiras en verso», leo hoy, 1 de junio de 2009, en ‘Shakespeare. La biografía’, de Peter Ackroyd (pág. 567), lo que, dada la coincidencia de fechas (y aunque ya nos han enseñado los antiguos maestros que se producen con regularidad matemática y carecen, por tanto, de otro valor que no sea la pura y hueca coincidencia), asumo como un guiño isabalino contra mis coplillas futboleras y demás metros burlescos. Recuerdo, de paso, un episodio escolar reciente. Plantea el libro de texto de 4º de ESO si en el verso «Ser —y no ser—: eternos, fugitivos», de un soneto de Blas de Otero, hay antítesis o paradoja, que en tales sutilezas retóricas se mueven a veces las, así llamadas, actividades. «¿Tú sabes quién es Hamlet?», le pregunto a un alumno de la primera mesa antes de aplicarme a la demostración. «Sí, claro», responde con total seriedad y con sonrisa de whew emoticono, «Hamlet y Gretel».