24.3.11

Suscribo

«Los lunes son mi día más pesado: tengo tres horas seguidas de clase, doy tres materias que no me gustan a tres grupos que no me interesan» (Jorge Ibargüengoitia, ‘Estas ruinas que ves’, RBA, pág. 65). Lunes, martes, miércoles, enero, febrero, marzo, retroactivamente y sucesivamente, amén.

19.3.11

Postrimería

Si no hallo
dream nocilla
en la #
me desmallo.

10.3.11

Gregorías

Diez o doce hemos leído esta mañana en clase y de la serna. Gregorías. Sic. Monstruoso insecto tras el sueño inquieto.

7.3.11

Hipotaxis

§. Cuando el pintoresco y extravagante guardia municipal que les franqueaba cada mañana el paso de cebra y velaba por la seguridad vial de la chiquillería les vio venir, cansado sin duda de la chirriante algarabía que montaban los muchachos al bajar del autobús, aquejado acaso por algún síndrome gripal del crudo invierno o pensando tal vez que ya había soportado durante demasiado tiempo sus escaramuzas, que iban de las travesuras peatonales a la siempre peligrosa invasión de la calzada, les dijo, no más por fastidiar, que sabía de buena tinta que los exámenes a los que les sometían durante el mes de marzo no tenían ningún valor, salvo el valor simbólico de las penitencias de cuaresma, menos aún si versaban sobre la sintaxis de las proposiciones adjetivas y sustantivas, nunca supo ni pudo llegar a saber que los muchachos, bordes unos y otros bordillos, no lo creyeron en ningún momento ni experimentaron temor alguno ante tan severas advertencias académicas, y no precisamente porque de sobra supieran que la renovada policía urbana carecía de conocimientos gramaticales, además de ignorar que en la enseñanza secundaria obligatoria la oración compuesta era y es un aprendizaje secundario más que obligatorio, sino porque nunca pudo sospechar que el más atrevido de ellos iba a sacar de la mochila un láser made in China, a pulsar el interruptor power on y a dejarlo desintegrado para siempre sobre las bandas rojas del paso de cebra.