25.11.09

¡Olé! y cielo

Como todos los palíndromos están en google, enredados en blog o en páginas de vario capricho («Anita, la gorda lagartona…», por ejemplo, suma 19.200 resultados), cuando de pronto, impensadamente, advierto uno (se me ocurre, quiero decir), consulto enseguida, con precaución, sin esperanza, para caer sin más en el lóbrego y blóguero desaliento del aficionado que llega tarde al pasatiempo porque se adelantó un usurpador. Por eso me ha sorprendido que el poderoso arsenal del universo virtual no arroje ni un solo resultado (aunque enseguida saldrán varios, repartidos por ahí, multiplicados) con ¡OLÉ! Y CIELO, tan menudo, tan humilde, que, por lo demás, tanto podría ser un titular festivo, el resumen de un festival falmenco al aire libre o, en fin, un título sin cuerpo (olé sin piedra) del sin par Saúl Olúas.