24.9.05

Boscán

Cansado de periódicos, telediarios, estatutos, huracanes, obushes y otras acebesías o abecesías, que de ambas formas puede y debe decirse, vengo a caer en una antología de poesía lírica del siglo de oro sobre el soneto LXI de Boscán cuyos dos últimos versos se me quedan un tiempo en el oído y la memoria exigiendo un mutatis mutandis XXI: «Y es justo en la mentira ser dichoso / quien siempre en la verdad fue desdichado».