Apurar cielos pretendo
Durante mucho tiempo, dejándome llevar por la cohesión del octosílabo, recordé estas palabras de Segismundo en un sentido incongruente, a saber, «pretendo apurar cielos», con «cielos» como complemento directo de «apurar». Sólo más tarde, cuando la lectura sustituyó a la memoria o cuando aprendí el valor de los signos de puntuación, advertí que «cielos» es vocativo: «apurar, cielos, pretendo / qué delito cometí / contra vosotros naciendo». Pero ya era demasiado tarde. En mi entendimiento conviven las dos versiones y tengo que elegir en cada caso aquello que el sujeto pretende apurar, los cielos o el delito cometido. Sigo prefiriendo, en todo caso, la primera, infantil y remota, que también me parece más poética, más trágica, más heroica.
<< Inicio