10.1.10

Tac tac tac

Según se promulga en Real Decreto
requiere el rango de bibliotecario
el ejercicio consuetudinario
de un riguroso y rígido soneto.

Con regocijo acojo el cuodlibeto,
echo mano de un vasto silabario,
encomiendo la rima al diccionario,
y a las métricas leyes me someto.

Y así al son del reloj y su tictac
con morse consonante y taquimeca
en blocs con logotipo de la fnac

pergeño cada día catorce endeca-
sílabos con los dedos —tac, tac, tac—,
meritorio ratón de biblioteca.