25.1.09

Arcaísmos

Hacía tiempo que no oía la expresión que he oído a un viejo paseante profesional esta mañana, en el circuito del Parque de la Coronación, a pregunta de otro no menos viejo paseante profesional: «Estoy poco católico», ha dicho. Y no he podido menos que seguir mi propio paseo de aficionado intentando averiguar cuándo invadiría el léxico eclesiástico la parcela sanitaria, cómo se produjo la tranposición de la salud del alma a la del cuerpo, esto es, del pecado a la enfermedad, en la jerga coloquial y si el caso sería equiparable a la vieja y rancia atrofia ideológica de «hablar en cristiano».